viernes, 25 de diciembre de 2009

QUÉ BELLO ES VIVIR

Nochebuena tiene sus tradiciones, sé que todavía no has conseguido borrar de tu mente la imagen de toda tía Engracia que nos alegra la noche cuando rellenando constantemente su copa de Sidra El Gaitero (o cava o incluso orujillo para las curtidas que están en un nivel superior) dice "No hija, si yo solo quiero un sorbito", otra posibilidad es que hayas sufrido los berridos de tu tio Braulio que insiste en convertir tu casa año tras año en el casting de Operación Triunfo. Tras este tipo de detalles que construyen la verdadera navidad y tu propia resaca entiendo que tal día como hoy te cueste gritar al viento ¡Qué bello es vivir! 

¿Cuántas películas navideñas habrán hecho desde 1946? ¿Cientos?...Ninguna se ha acercado ni siquiera a kilómetros a la perfección de este canto optimista de Frank Capra. Televisiones del mundo entero la programan estos días sabiendo que muchos no podemos resistirnos, porque consigue conjugar la máxima ternura con la clásica moraleja de "Cuento de Navidad" de Charles Dickens. 

Frank Capra, director de otros grandes clásicos como "Sucedió una noche", "Vive como quieras" o "Arsénico por compasión" tiene en este película la que para muchos es la cumbre de su filmografía. Parte de los críticos le achacan que la bondad de sus películas es ilimitada, aunque yo veo en su idealismo exacerbado un trasfondo que busca la sonrisa ante la dureza de la realidad.

Interpretada por un increíble James Stewart, cuya prolífica y polifacética trayectoria esta fuera de toda duda con títulos como "El hombre que mató a Liberty Valance", "La ventana indiscreta" o "Vértigo". En esta película pasa en segundos de la desesperación más absoluta a la rabia incontenible, y todo ello con un halo de amor a la vida incluso cuando gira alrededor de la muerte. Con él Donna Reed como esa gran mujer que dicen siempre hay detrás de un gran hombre, y que también trabajó en grandes éxitos como "De aquí a la eternidad" o la versión de "El retrato de Dorian Gray (de 1945)"

En la sencillez de la historia está su complejo secreto, durante la Nochebuena de 1945, abrumado por la repentina desaparición de una importante cantidad de dinero, George Bailey , banquero de la pequeña localidad de Bedford Falls, quiere suicidarse; Clarence un viejo ángel que aún no ha conseguido sus alas, quiere hacerle recapacitar sobre el verdadero sentido de la vida.
Porque pasan los años y la obra de Capra no ha perdido un ápice de frescura, sin que nada se quede anclado en el pasado, vemos a George crecer soñando vivir una vida, y después disfrutamos y sufrimos viéndole vivir una vida llena de sueños.

Muchas veces hay que llenar de sueños e idealismo la vida, es mucho más divertida. ¡Ay!...¡Qué bello es vivir!



"Te regalo la luna"

"Quiero volver a vivir"

"Nadie es un fracaso si tiene amigos"





Estos días las calles y centros comerciales tienen banda sonora propia, con villancicos tradicionales como "Los peces en el río", pero también con grandes clásicos como "White Xmas" de Bing Crosby o "The Xmas song" de Nat King Cole. Fuera de connotaciones religiosas (el trabajo del colegio de monjas no consiguió sus frutos conmigo) te dejo esta pequeña sorpresa "En el portalín de piedra" villancico asturiano cantado por Víctor Manuel, cuando balbuceaba ya esperaba ilusionada a los Reyes con el sonido de esta canción…¡FELICES FIESTAS!


¿Y tú qué opinas?

Próximamente más, y si es posible...mejor

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