Los Oscar se acercan y me acordé del nominado como mejor cortometraje de ficción de 2007, "Éramos pocos" de Borja Cobeaga. El joven director de "Pagafantas" vio recompensado su trabajo con multitud de premios con este corto, que llegó tras la ironía de otro anterior, "La primera vez", también recomendable.
En ambos contó con la colaboración de Mariví Bilbao que demuestra que es muchísimo mas que la alocada abuela de "Aquí no hay quien viva"; Ramón Barea y Alejandro Tejerías le dan la réplica demostrando la apatía por la vida en la que se han sumido sus personajes.
Cuando un padre y un hijo son abandonados por su mujer y madre respectivamente, se encuentran desamparados y deciden ir en busca de la abuela olvidada en el asilo para que les saque las castañas del fuego. A partir de ahí, el guión del propio director junto con Sergio Barrejón no deja de lanzarnos guiños de humor, y es que...nadie sabe lo que puede dar de sí una buena tortilla de patata hasta que la prueba. Una cómica reflexión sobre la soledad y el egoísmo con ese punto irónico que tanto se agradece.
¿Y tú qué opinas?
Próximamente más, y si es posible...mejor
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